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Las mejoras en materia de utilización eficiente de los recursos exigen combinar el planteamiento de la cadena de valor con la aplicación de soluciones técnicas complejas a nivel de empresa. Se estima que las mejoras en la utilización eficiente de los recursos a lo largo de las cadenas de valor podrían reducir las necesidades de materias primas entre un 17 % y un 24 % de aquí a 2030. 

Por otra parte, en la UE, en la actualidad, el 60 % del total de residuos no se recicla, composta o reutiliza, lo que indica una enorme pérdida de recursos valiosos e importantes oportunidades de negocio para las pequeñas y medianas empresas (pymes), que pueden aplicar y vender productos, servicios y soluciones ecológicos. Las oportunidades empresariales también pueden crearse a partir de la integración de modelos de negocio más circulares y tecnologías verdes en las pymes existentes y futuras en todos los sectores, incluidos los servicios.

La Estrategia Europa 2020 destaca la prioridad de la UE de convertirse en una economía sostenible y establece ambiciosos objetivos en materia de acción por el clima y eficiencia energética. La Iniciativa en favor de las Pequeñas Empresas (Small Business Act, SBA) puso de relieve que la UE y los Estados miembros deben permitir que las pymes conviertan los desafíos medioambientales en oportunidades. 

El Plan de acción ecológico (GAP, por sus siglas en inglés) establece una orientación clara y un marco para la forma en que la UE, en cooperación con los Estados miembros y las regiones, tiene intención de ayudar a las pymes a aprovechar las oportunidades de negocio que ofrece la transición a una economía verde. 

Esta iniciativa presenta concretamente una serie de acciones nuevas o revisadas orientadas hacia las pymes a escala europea. El GAP tiene por objeto: 
1) mejorar la eficiencia en la utilización de los recursos de las pymes europeas; 
2) apoyar la iniciativa empresarial verde; 
3) explotar las oportunidades que presentan unas cadenas de valor más verdes, y 
4) facilitar el acceso al mercado a las pymes ecológicas. 

El Plan de acción se basa en el Plan de acción sobre ecoinnovación, que ofrece orientaciones en materia de política de ecoinnovación y financiación en el marco de la Estrategia Europa 2020. Existe toda una serie de acciones e instrumentos del EcoAP que son muy importantes para las pymes. Ejemplos de ello son el Mercado de la innovación, el Observatorio de la Ecoinnovación, el Foro Europeo de la Ecoinnovación y las asociaciones europeas para la innovación; así como los instrumentos de financiación de la ecoinnovación en el marco de Horizonte 2020. Las acciones que figuran en el Plan de acción ecológico y el EcoAP son, por tanto, complementarias y generan importantes sinergias. Durante la fase de ejecución se llevará a cabo la adecuada coordinación entre EcoAP y el Plan de acción ecológico.

El Plan de acción ecológico se centra en las acciones a nivel europeo que están diseñadas para adaptarse a las actuales iniciativas «verdes» de apoyo de las pymes a escala nacional y regional, y reforzarlas. Se ha elaborado en colaboración con los interesados que trabajan en este ámbito en los Estados miembros y se llevará a cabo en cooperación con estos. La mayoría de los Estados miembros y muchas regiones cuentan con organizaciones e instrumentos especializados, además de la financiación canalizada a través de la política regional, que proporcionan apoyo a las pymes en los ámbitos que constituyen el objeto de este Plan de acción. Entre estas medidas se contemplan: facilitar la información, crear capacidad, fomentar la cooperación y la creación de redes, ofrecer financiación directa, facilitar el acceso a la financiación, etc.

El Plan de acción ecológico establece una serie de objetivos y enumera las acciones que se ejecutarán a escala europea dentro del marco financiero plurianual 2014-2020. Todas las acciones son o bien versiones nuevas o bien revisadas de acciones previas que, de ahora en adelante, tienen en cuenta las posibilidades de negocio de la eficiencia de los recursos y el acceso a los mercados verdes. Las acciones también tendrán en cuenta los resultados de la consulta pública sobre el Plan de acción ecológico efectuada durante el cuarto trimestre de 2013.

La ecologización de las pymes con vistas a una mayor competitividad y sostenibilidad

La mejora de la eficiencia de los recursos en las pymes ofrece un enorme potencial de reducción de los costes de producción y de aumento de la productividad. Se calcula que una mejor utilización de los recursos supone en su conjunto un ahorro potencial de 630.000 millones EUR al año para la industria europea. Aún son demasiado pocas las pymes europeas que son conscientes de ese potencial. Por otra parte, los esfuerzos de las pymes por lograr posibles ahorros mediante una mayor eficiencia de los recursos no gozan del suficiente respaldo. Ello no solo puede dar lugar a una creciente brecha en la productividad en Europa entre las empresas que realizan mejoras de eficiencia en la utilización de los recursos y las que no lo hacen, sino que también debilitaría la competitividad general de las empresas europeas y reduciría las posibilidades de un gran número de pymes para posicionarse en las cadenas de valor de ámbito global.

¿Por qué es esto importante para las pymes?

En general, las pymes europeas son conscientes de que es importante que sean eficientes a la hora de utilizar los recursos, dado que el 75 % de las pymes de la UE han sufrido un aumento en los costes de materias primas en los últimos cinco años. Al menos el 93 % de las pymes de la UE están adoptando una medida como mínimo para utilizar los recursos de manera más eficiente, lo que, en la mayoría de los casos, se traduce en una acción de bajo coste. Sin embargo, solo el 42 % de las pymes que aplican medidas para mejorar la eficiencia de los recursos ha experimentado la reducción de sus costes de producción, lo que indica que es necesario ofrecer orientación a las pymes acerca de la rentabilidad de las inversiones en eficiencia de los recursos.

Además, existen grandes diferencias entre los niveles de eficiencia de los recursos en el sector manufacturero en todos los Estados miembros. El consumo de energía y la generación de residuos para un tipo específico de producción difieren considerablemente entre las empresas manufactureras en los diferentes países europeos.

Las mejoras relativas a la eficiencia en el uso de los recursos requieren un conocimiento especializado del que habitualmente no se dispone en las pymes, por lo que estas necesitan asesoramiento para detectar los posibles beneficios a largo plazo de aplicar la innovación a sus procesos y a su organización con el fin de mejorar la eficiencia de los recursos. Por otra parte, las pymes que buscan financiación para grandes inversiones iniciales en materia de eficiencia de los recursos se encuentran con que, en determinados casos, los intermediarios financieros consideran que se trata de un ámbito de alto riesgo. Por consiguiente, es importante, en primer lugar, animar a las pymes a buscar el adecuado asesoramiento en materia de eficiencia de los recursos a través de campañas comerciales orientadas a las pymes y, en segundo lugar, que les proporcionen asesoramiento de este tipo en sus respectivas regiones.



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La Comisión proporciona financiación a proyectos e iniciativas que promueven sus prioridades políticas en toda la Unión Europea y en otros lugares. La Dirección General de Medio Ambiente permiten que los fondos disponibles a través de 3 programas diferentes, el fondo LIFE y la Eco-Innovación y la Competitividad, y el Programa Marco de Innovación y subvenciones de funcionamiento para las organizaciones ambientales no gubernamentales (ONG).

LIFE es el instrumento financiero de la Unión Europea que da apoyo a proyectos de conservación del medio ambiente y de la naturaleza en toda la Unión y, en algunos países candidatos y vecinos. Desde 1992 LIFE ha cofinanciado alrededor de 2.750 proyectos por un total de 1,35 billón €.

El Programa marco para la competitividad y la innovación - iniciativa empresarial y la innovación (CIP-EIP) apoya proyectos de eco-innovación a través de tres iniciativas: los instrumentos financieros, la red de agentes y los proyectos piloto y comerciales.

Las organizaciones no gubernamentales europeas activas en el ámbito del medio ambiente son agentes importantes en el desarrollo y la aplicación de la política ambiental. También se configuran como canales de información sobre las preocupaciones que los ciudadanos tienen sobre el medio ambiente y juegan un papel importante en la sensibilización de los ciudadanos sobre cuestiones y políticas ambientales específicas. Las ONG ambientales son también valiosos intermediarios en la labor de la Comisión. Un número importante de ayudas se otorgan cada año a varias ONG para facilitar su trabajo. 

Los tres programas ofrecen oportunidades de financiación a través de subvenciones y licitaciones

Proyectos piloto y proyectos preparatorios que gestiona la Dirección General de Medio Ambiente se pueden encontrar en las subvenciones y las llamadas para las páginas de condiciones.

Oportunidades de financiación de otras Direcciones Generales de la UE













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Las ciudades europeas no necesitan mirar más allá de Ljubljana en busca de inspiración sobre la forma de reducir los residuos y utilizar los recursos de una manera más inteligente.

La capital de Eslovenia, que es en 2016 la Capital Verde Europea, es la primera capital europea que está cerca de lograr una sociedad sin residuos donde los productos y los recursos son reciclados o reutilizados, y casi nada termina en los vertederos. El sueño de todo economista circular

Es un logro notable, llevado a cabo en la última década, en la que los responsables políticos , las empresas y los ciudadanos han trabajado juntos para crear un entorno urbano más sostenible. Las mejoras implementadas en Ljubljana demuestran que las medidas ambientales no son un gasto, sino que se trta de una inversión a futuro y aumentan la calidad de vida de los ciudadanos.

Ciudad embajadora para el desarrollo sostenible 


Para celebrar su premio, Ljubljana actuará como embajadora para el desarrollo urbano sostenible, con el fin de compartir y promover las mejores prácticas puestas en marcha para tener un impacto positivo tanto en el entorno urbano como en calidad de vida. 

El cuidado del medio ambiente urbano significa el cuidado de la salud y el bienestar de las personas que viven en nuestras ciudades. En Ljubljana se ha demostrado que con una buena inversión se pueden obtener grandes beneficios tangibles e intangibles.

La estrategia de economía circular puesta en marcha facilita el reciclaje y la reutilización, mejora la separación y tratamiento de residuos, y anima a los ciudadanos y las empresas para reducir la cantidad de residuos que generan. 

Entre los cinco finalistas de Capital Verde Europea 2016, Ljubljana fue la única ciudad sin una planta de incineración de residuos o con planes para construir una. En su lugar, se han centrado en soluciones alternativas, incluyendo un plan de gestión integral de residuos que se ha alcanzado progresos significativos hacia el desarrollo de una sociedad de residuos cero.

La ciudad fomenta activamente el reciclaje de productos a través de su Centro de Reutilización Pública - una tienda equipada con muebles de segunda mano - donde en promedio se intercambian 75 productos, se venden 100 , y otros se recogen y se reparan. La iniciativa, que es gestionada por la firma de gestión de residuos pública Snaga, ahora se está extendiendo al resto del pais. También es de destacar que el programa educativo de Ljubljana enseña a los jóvenes la importancia de la creatividad, la innovación, el espíritu empresarial social y la economía verde.

Reutilizando más, perder menos

A través de una mayor conciencia de la importancia de la reutilización de productos y recursos, los residentes de Ljubljana han reducido la cantidad de residuos que generan un 15% durante los últimos 10 años.En 2014, cada persona en promedio, produjo 283 kg de residuos, que es un 41% inferior a la media europea. 

El reciclaje y recogida de residuos en puntos de fácil acceso, junto con la recogida puerta a puerta de algunos tipos de residuos urbanos, son prácticas que aseguran que alrededor de dos tercios de los residuos domésticos y de empresas son reciclados o compostados. Como resultado, la cantidad de materiales recuperados en la ciudad aumentó de 16 kg por persona en 2004 a 145 kg en 2014, lo que reduce la cantidad de basura que termina en los vertederos en un 59%. 

La recogida y separación es gestianada por Snaga que opera una de las más modernas instalaciones de tratamiento de residuos en Europa. Desarrollado con el apoyo de los Fondos de Cohesión de la UE, el Centro Regional para la Gestión de Residuos fuera de Ljubljana es el mayor proyecto medioambiental en Eslovenia. Los Fondos Estructurales de la UE han proporcionado 78 millones € para esta infraestrucutura. 

La planta está configurada para producir 25.000 toneladas de materias primas secundarias , y energía verde, a partir de los residuos recibidos. Mediante el uso de tecnología de última generación, se asegura que sólo alrededor del 5-10% de los residuos que recibe termine en los vertederos. Todo lo demás, desde el papel y plásticos de vidrio y metal, se recicla. La materia orgánica se transformen en biogás para alimentar la instalación, o se convierte en compost para espacios verdes de Ljubljana. 

A su vez se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero, como el metano, causadas por la descomposición de los residuos orgánicos en los vertederos, y evita la contaminación de las aguas subterráneas. 

 Ljubljana tiene objetivos ambiciosos para el futuro, como por ejemplo aumentar la recogida selectiva al 75% y reducir los desechos residuales anuales a 60 kg por persona en 2025, lo que garantiza su condición continua como una ciudad verde a modo de ejemplo para el futuro. 




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Una economía verde ofrece nuevas oportunidades de empleo. Pero hay que tomar medidas para que los trabajadores tengan los conocimientos adecuados para garantizar el éxito de la transición hacia una economía circular, lo cual requiere una inversión significativa.


¿Qué pueden tener en común un diseñador, un ingeniero, un planificador urbano y un banquero? La respuesta es que la totalidad o parte de su trabajo pueden estar relacionados con la protección del medio ambiente.

El desarrollo de una economía y la creación de empleos verdes requerirá una inversión significativa en las generaciones futuras. Las industrias verdes ofrecen grandes oportunidades para los jóvenes. Pero no es sólo en las eco-industrias, como la energía, los residuos, tratamiento de aguas, y la calidad del aire, en las que están surgiendo nuevos empleos y las competencias profesionales. 

Casi todos los sectores estarán involucrados en la transformación de los sistemas de producción para hacer un uso más inteligente de los recursos y la tecnología.  Desde el año 2000, el empleo en las industrias ecológicas ha aumentado en un 20% y producido más de 4,2 millones de puestos de trabajo. Se estima que al aumentar la productividad de la UE en un 30% para el año 2030, podría aumentar el PIB en un 1% y crear 2 millones de puestos de trabajo. 

Asegurar que los trabajadores tienen los conocimientos adecuados significa adaptarse a las necesidades y la rápida evolución de las empresas del sector, así como diseñas una planificación de formación a medida. 

Pero los empleos verdes no son sólo los puestos de trabajo de alta tecnología. Europa necesitará científicos, investigadores e ingenieros para desarrollar tecnologías de vanguardia, pero tales soluciones innovadoras deben ser aplicadas prácticamente en el "mundo real" en varios sectores. Por ejemplo, un arquitecto puede diseñar la eco-casa perfecta, pero el trabajo in situ seguirá siendo llevado a cabo por carpinteros, electricistas y fontaneros. por lo tanto, es vital que estos trabajadores reciben la formación necesaria para aprovechar las últimas tecnologías verdes y aplicaciones. 

Estados miembros a seguir

Algunas iniciativas ya están en marcha en algunos Estados miembros para formar adecuadamente a su mano de obra. 

En Estonia, la empresa estatal de energía Eesti Energia planea reducir sus emisiones de carbono mediante la capacitación de los trabajadores de energía eólica, energía hidroeléctrica y los relacionados con la auditoría energética orientados a la producción de energía verde. 

En el Reino Unido, British Gas ha abierto su primer centro de formación verde en Gales, proporcionando una formación práctica en los sistemas renovables y de eficiencia energética para más de 1300 personas al año. Future Skills Scotland está analizando las tendencias futuras del mercado laboral y de las instituciones de educación superior.

Además de los sectores indirectos, como el ecoturismo y la agricultura ecológica, también se beneficiarán de estos planes.. 

Varios instrumentos financieros de la UE están ayudando a los Estados miembros y los agentes sociales y económicos para invertir en el desarrollo de esta formación; en particular el Fondo Social Europeo, Erasmus +, Programa de educación y formación de la UE, y el Programa de investigación e innovación Horizonte 2020.

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¿Cómo pueden ayudar los fondos europeos a hoteles españoles o pequeñas empresas en la República Checa para ahorrar en las facturas de energía y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero? Una respuesta rápida es mediante el programa Financiación privada para la eficiencia energética, una nueva iniciativa que apoya mejoras de eficiencia energética por parte de empresas, individuos y organismos públicos en toda Europa. 

Lanzado bajo el paraguas del programa LIFE de la Unión Europea y gestionado por el Banco Europeo de Inversiones,el programa de financiación apoya a los bancos y entidades que prestan dinero a proyectos de eficiencia energética puestos en marcha por las pequeñas empresas (PYME), particulares, y municipios.

El programa proporciona préstamos a largo plazo a los bancos que a su vez financian en préstamos más pequeños a los beneficiarios finales. Este dinero puede ser utilizado, por ejemplo, para mejorar los sistemas de calefacción en escuelas u oficinas, ayudar a las empresas compran equipos de eficiencia energética, o mejorar el aislamiento en edificios residenciales y comerciales. 

Los préstamos suelen oscilar entre 40.000 € a 5 millones €. Además de los préstamos a largo plazo, el programa ayuda a los bancos intermediarios con una  distribución de riesgos que permita mejores condiciones de financiación, además aporta un servicio de apoyo de expertos para ayudar a los bancos a evaluar los proyectos con mayor eficacia y proponer productos financieros adaptados. 



El dinero, donde importa 

Con el respaldo de los 80 millones de € del programa LIFE durante 2014-2017, se pretende impulsar una inversión total de 480 millones €. Sin embargo, tras un gran interés, el Banco Europeo de Inversiones ha planteado el objetivo de € 1 mil millones de nuevas inversiones en eficiencia energética. 

Los primeros programas a nivel nacional ya han comenzado. Komerční de la República Checa está financiando inversiones a pequeña escala por un total de 75 millones de €, con un enfoque en medidas de eficiencia energética en las PYME, tales como la mejora del aislamiento, calefacción e iluminación en edificios, la reutilización de la energía residual de la producción, y el mayor uso de energías renovables. 

En Francia, Crédit Coopératif invertirá hasta 75 millones € en la construcción de obras de renovación y aislamiento; mientras que en España, el banco Santander está financiando inversiones de 50 millones de € para mejorar la eficiencia energética en hoteles y otros alojamientos turísticos. 

Fomentando la inversión del sector privado en eficiencia energética, el programa de financiación contribuye a cumplir los objetivos climáticos y energéticos de la UE para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en al menos un 40% y aumentar la eficiencia energética, al menos, del 27% para el 2030, en comparación con 1990. 

Financiación Privada para la eficiencia energética es uno de los dos nuevos instrumentos financieros del LIFE, el otro es el programa Facilidades naturales de capital financiero.

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El transporte conecta personas, culturas, ciudades, países y continentes. Es uno de los principales pilares de la sociedad y la economía moderna, lo que permite a los productores vender en todo el mundo y los viajeros a descubrir nuevos lugares. Las redes de transporte también garantizar el acceso a los servicios públicos esenciales, como la educación y la salud, lo que contribuye a una mejor calidad de vida. También ayuda a estimular la economía en las zonas remotas, es un sector que crea un gran número de puestos de trabajo y difunde la riqueza.

Pero cada vez más se utilizan medios dependientes de combustibles fósiles como aviones y automóviles, causando también más contaminación y poniendo en riesgo el medio ambiente y la salud . El informe Signals 2016 de la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA) explora cómo sector del transporte dependiente del carbono se puede convertir en un sistema de movilidad limpio e inteligente.

El transporte también juega un papel decisivo en la formación de la forma en que vivimos : la comida, la ropa y los residuos domésticos, tienen que ser transportados; influye en qué productos están en oferta y lo que consumimos; y utilizamos los sistemas de transporte para ir al trabajo, la escuela, el teatro y el día de fiesta. Hoy en día las conexiones de tren de alta velocidad hacen posible largos viajes diarios, permitiendo a la gente a vivir cientos de kilómetros de distancia de su trabajo.


El informe de la AEMA, Señales 2016 - Hacia la movilidad verde e inteligente, va más allá de datos y estadísticas de transporte, dando una explicación a fondo de los hechos claves y tendencias y desafíos ambientales que debe encarar el sector del transporte, y las decisiones ambientales que tenemos que adoptar para garantizar una movilidad verde y eficiente. 


El transporte sustenta nuestra sociedad y la economía moderna. Al mismo tiempo, es responsable de una cuarta parte de las emisiones de gases de efecto invernadero de la UE, y como impactos ambientales más significativos provoca contaminación del aire, acústica y fragmentación del hábitat. La Unión Europea ya ha tomado medidas para mitigar los efectos de la contaminación del transporte, y ha puesto en marcha una estrategia para crear una economía baja en carbono para el año 2050, en la que el transporte juega un papel clave en la reducción de las emisiones. 



Hoy en día la demanda de transporte en Europa es significativamente mayor que en 2000 y se espera que continúe creciendo. De acuerdo con estimaciones de la Comisión Europea , en el año 2050 se proyecta un crecimiento de más del 50 % del transporte de mercancías y en un 80 % en comparación con los niveles de 2013 el transporte de pasajeros .


El 94% del combustible que consume el sector del transporte de la UE proviene del petróleo. Está claro que la descarbonización del sector de transporte de Europa tomará su tiempo. Se requiere una combinación de medidas, incluyendo una mejor planificación urbana, mejoras tecnológicas y una mayor utilización de combustibles alternativos. Un transporte más limpio y más inteligente en realidad puede satisfacer las necesidades de Europa y al mismo tiempo ofrecer beneficios para la salud pública y el medio ambiente, incluyendo un aire más limpio, menos accidentes, menos congestión y menos contaminación acústica. 


Por otra parte , a pesar de la importancia central de transporte para nuestra economía y calidad de vida, no se presta suficiente atención a la preparación de la infraestructura y a los retos que plantea el cambio climático. ¿Pueden afrontar el sector ferroviario, aérero y las infraestructuras de carreteras el incremento de las temperaturas? Las interrupciones en los servicios de transporte (cenizas de volcán en la atmósfera , inundaciones en carreteras carreteras, o vías férreas dañadas debido a las condiciones meteorológicas extremas) pueden tener graves consecuencias para los viajeros y las empresas, mucho más allá de la zona afectada . El sistema de transporte también tiene que adaptarse a los cambios en la demografía de Europa. ¿Cómo puede el transporte público puede adaptar a las necesidades de movilidad de una población cada vez mayor?




Señales de 2016 incluye artículos centrados en la situación del sector de transporte de Europa, su impacto en la salud pública, la cuestión de recorrido de los alimentos, la aviación y el transporte marítimo, además de una entrevista sobre cómo las ciudades pueden planificar la movilidad inteligente y el cambio climático.

+ info: AEMA 

Todos nos preguntamos qué pasará después del Brexit, ¿el fin del sueño europeo? ¿el apocalipsis económico? ¿la tormenta perfecta separatista? Quien sabe si nos irá mejor o peor a británicos, europeos y españolitos de a pie, el tiempo lo dirá; a buen seguro con tanta especulación algunos, los de siempre, saldrán ganando. También la salida de Gran Bretaña de la UE tendrá efectos en las políticas energéticas y climáticas a ambos lados del canal. 

En el ya real post-Brexit, Reino Unido todavía tendrá lazos energéticos con la UE, pero habrá grandes cambios. La salida de Gran Bretaña de la UE obligará a una profunda reestructuración de las políticas energéticas y climáticas de la UE, y se borrará de la escena a un aliado crucial para los países centroeuropeos; pero también dará a Londres mucha más libertad para dedicarse a sus proyectos nucleares. Aquí estamos en pie de guerra contra las centrales, mientras que al otro lado de los Pirineos y del Canal tienen unas cuantas, y si hubiera o hubiese desastre, Gea no lo quiera, algo de radioactividad pillaríamos también...

Reino Unido ha sido un verso libre en muchas de sus polítcas y way of life, conducen por la izquierda, la libra, el sistema métrico, el té de las 5 y el patadón en el fútbol... no iba a ser menos en cuanto a la política energética de la UE, apostando por la energía nuclear y las fuentes de gas de esquisto (el no muy popular fracking), rechazados por otros socios europeos, incluido el Reino de España. Sus alianzas han ido cambiando con el tiempo, siempre con el objetivo de que la interferencia de Bruselas fuese mínima y con la adopción de un planteamiento económicamente ambicioso para hacer frente al cambio climático. Gran Bretaña tenía previsto invertir en los próximos años más de un billón de euros en energías renovables (730 millones de libras para el año 2021 en nuevos parques eólicos offshore, en alta mar, y otras tecnologías de energía renovables, 50 millones de libras para la investigación de dispositivos de almacenamiento de energía, y otros 30 millones de libras para construir los primeros reactores nucleares de pequeña escala del mundo). Después de la histórica votación todo está en el aire.

Hay muchas cosas que perder a ambos lados de la canal después de la votación del jueves. En el post-Brexit Reino Unido se seguirá ligado al resto de Europa a través de las actuales conducciones de gas y electricidad, y el mercado de comercio de emisiones es poco probable que cambie a corto plazo; pero obviamente tendrá menos influencia en las decisiones del bloque europeo. La UE, en cambio, perderá una voz fuerte a favor del libre mercado, lo que ha contribuido históricamente a bajar el tono de algunos políticas más intervencionistas procedentes de algunos países continentales. Al salir de la UE , el Reino Unido podría quedar relegado a ser una especie de grupo de presión en Bruselas, algo así como pasa ahora con Noruega.



Aquí están las cinco maneras en que el Brexit puede tener un impacto en la energía y el clima:

1. Reorganización de políticas climáticas

El Reino Unido se ha sido tradicionalmente un líder en políticas climáticas. En 2008 fue el primer país en establecer un compromiso a largo plazo de disminución de las emisiones de de gases de efecto invernadero en un 80 por ciento para 2050 y creó un mercado voluntario de emisiones de carbono antes de que la UE pusiera en marcha su propio sistema en el bloque. Después del Brexit no hay ninguna promesa de que continúen con estas políticas.

El nuevo gobierno podría, por ejemplo, reestructurar los objetivos de energías renovables del país y abolir el impuesto sobre las plantas de energía altamente contaminantes.

Un liderazgo post-Cameron también podría cambiar el enfoque del país para el acuerdo climático de París. Desde el punto de vista del acuerdo de París, el Reino Unido lo adoptó como parte de la UE por lo que habrá que revisar el acuerdo en un futuro.

2. Seguridad energética

La seguridad energética era uno de los aspectos importantes del debate Brexit, con el argumento de que la salida de la UE podría debilitar el poder de negociación del Reino Unido en la política energética global, recordando la crisis del petróleo de los 70´s y la reciente crisis del gas con Rusia.

3. Facturas energéticas, ¿suben ... o bajan?

Tanto los partidarios del Brexit como los del Remain argumentaron que su posición aseguraría una bajada en las  facturas de energía del hogar y de la gasolina.

Un informe independiente encargado por el operador de red de energía y gas británica National Grid concluyó a favor del Remain. La salida de la UE podría costar al Reino Unido hasta £ 500 millones por año en la década de 2020, como resultado de la incertidumbre sobre las inversiones en energía y clima.

La permanencia en la UE habría mantenido el bajo coste de la financiación del sector de la energía, pero por otro lado partida dejará libre a Gran Bretaña de los objetivos de todo el bloque que limitan la elección de las tecnologías energéticas, según el informe. Los precios de la energía británicos dependen de las políticas de la UE. El país importa alrededor del 6 por ciento de su electricidad del Continente, y el 50 por ciento de su gas de dentro y fuera de la UE.

Por otro lado se argumenta que sin el costo de ser miembro de la UE, el gobierno tendrá más dinero para ayudar a los más pobres del Reino Unido, por ejemplo mediante la reducción del IVA sobre el combustible doméstico. 

4. Europa Central y pierde un amigo

Como miembro de la UE, el Reino Unido formó una alianza con los países de Europa central y oriental, en los debates sobre las competencias y poder de regulación que tiene la Comisión, y otros sobre las políticas climáticas y energéticas de cada país.

El Brexit será una pérdida para estos países, no sólo por la presencia del Reino Unido diversificó el grupo, sino porque tenía un gran número de votos en el Consejo de la UE - donde Gran Bretaña, Alemania, Francia e Italia tienen el mayor peso gracias a su población.

El Reino Unido y sus aliados querían un sistema flexible para asegurar que los países hacían los deberes para cumplir con los objetivos de energías renovables, las emisiones y los objetivos de eficiencia para el año 2030, y mantener la supervisión de la Comisión al mínimo. Lo cual entraba en conflicto con la filosofía países como Alemania, Dinamarca y Suecia, que quieren asegurarse de que los países rezagados cumplan y rindan cuentas de acuerdo a las metas establecidas.

Sin el poder bancario de Londres, los centroeuropeos tendrán más dificultades para resistir que Bruselas tenga más fuerza en las políticas nacionales de energía.

5. Los inversores a largo plazo, en la estacada

La salida del Reino Unido probablemente causará una gran conmoción en las empresas que planean construir plantas de energía renovable o perforar en busca de gas de esquisto en el Reino Unido.

Los jefes de las grandes petroleras y de gas de BP, Shell y Centrica estaban entre los 200 líderes empresariales que firmaron una carta de advertencia en febrero para dejar "poner la economía en riesgo" con el Brexit.

La ambigüedad acerca de la nueva relación de la UE y Reino Unido elevará la incertidumbre acerca de los cambios en las políticas energéticas y climáticas, dejando a los inversores en el limbo. 

La salida del mercado único también podría abrir el Reino Unido a crear nuevos impuestos a la importación de equipos tales como bases para parques eólicos marinos, plantas solares o tecnología de plantas nucleares exportadas desde Francia. Por contra se eliminan los derechos comerciales de la UE sobre las importaciones de equipos solares chinos, exponiendo a las empresas nacionales a los paneles y módulos mucho más baratos.

Fuente: Politico.eu

Un tercio de las zonas naturales y rurales de Europa están afectadas por la contaminación acústica, según un nuevo informe publicado por la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA) . La protección de las zonas aún no afectadas por el ruido puede aportar beneficios ambientales y de salud muy significativos.

Cada año, millones de toneladas de basura son depositadas en el océano, playas, bosques, y naturaleza en general. Las principales causas de que esto ocurra son, por un lado, los patrones insostenibles de consumo y producción presentes hoy en día en la sociedad, estrategias de gestión de residuos de baja calidad y la falta de sensibilización de la población. Para reducir la cantidad de basura en la naturaleza y dar visibilidad a este asunto, La Semana Europea de la Prevención de Residuos coordina anualmente una jornada de limpieza de espacios públicos a nivel Europeo.

Un movimiento Europeo

Diversas campañas se han llevado a cabo a nivel Europeo en el transcurso de los años para abarcar este problema de basura en la naturaleza. La jornada Europea de Limpieza de espacios públicos “Let’s Clean-Up Europe!” pretende aunar estas iniciativas para conseguir tener un evento a nivel Europeo que tenga lugar el mismo día a través de todo el continente, involucrando y llegando a la mayor cantidad posible de ciudadanos. Esta Jornada Europea de Limpieza de Espacios Públicos ha tenido lugar entre el 6-8 de Mayo 2016.

Al formar parte de “Let’s Clean Up Europe!” y ayudando a limpiar el ambiente que les rodea, los participantes pueden ver de primera mano la cantidad de basura que se vierte ilegalmente. Esta acción da a los ciudadanos una oportunidad única de concienciarse y sensibilizarse sobre este problema, y ayuda a cambiar el comportamiento de la gente.

Campaña europea de sensibilización frente a las basuras marinas

En 2015 esta campaña global movilizó 3.383 acciones simultáneas en espacios naturales y playas, involucró a 534.514 participantes voluntarios y evitó que 3.640 toneladas de residuosllegaran al mar.

El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, a través de la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa, y sus servicios periféricos, y Cruz Roja española participarán activamente en la campaña 2016 a través del proyecto “participación y voluntariado ambiental en costas”. Este proyecto fue beneficiario de la convocatoria general de proyectos de la Fundación Biodiversidad en 2015 y, entre sus actividades, se enmarcan 8 acciones simultáneas de voluntariado para este próximo fin de semana en diversas playas de Palma de Mallorca, Menorca, Tenerife, A Coruña, Granada, Huelva, Alicante, Valencia y Ceuta, que formarán parte de “Let’s Clean Up Europe”.

+ info: EWWR / MAGRAMA


La mitigación del cambio climático no depende únicamente de que la industria cumpla o supere sus objetivos. Todos podemos aportar nuestro granito de arena. Las ciudades y los hogares en particular deben actuar también para reducir las emisiones. 

Las ciudades están en primera línea de la lucha contra el cambio climático. Según el informe señales 2015 de la AEMA, en marzo de 2015, dirigentes de treinta ciudades europeas acordaron destinar un total de 10.000 millones de euros anuales a comprar bienes y servicios ecológicos en sectores altamente generadores de emisiones, como el transporte, la calefacción doméstica y el suministro de energía. Esta iniciativa es complementaria al Pacto de los Alcaldes, un movimiento europeo en el que participan autoridades locales y regionales que asumen voluntariamente el compromiso de mejorar la eficiencia energética y el uso de los recursos energéticos renovables en sus territorios. Actualmente cuenta con 6 279 signatarios y su objetivo es cumplir y sobrepasar el objetivo de la UE de reducción del 20 % de las emisiones hasta 2020.

El sector doméstico también es esencial. Las pautas de consumo pueden afectar a las emisiones directa e indirectamente. Entre 2000 y 2007, los hogares compraron cada vez más bienes y servicios con menor presión ambiental por euro gastado. En particular, durante este período se compraron más viviendas, agua, transporte, alimentos, bebidas no alcohólicas, electricidad y otros combustibles compatibles con el medio ambiente. Sin embargo, es posible que el crecimiento del gasto total en muchas de estas categorías haya neutralizado las ganancias. Estos cambios en el consumo, junto con las mejoras en los procesos productivos y los servicios, han favorecido la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero en todas las categorías de consumo analizadas. 

Sin embargo, será necesario seguir mejorando la eficiencia y tender a un consumo ambientalmente menos intensivo, si continúa aumentando el consumo global. Más aún, no se ha de subestimar el impacto del consumo europeo de bienes manufacturados fuera de la Unión. Un acuerdo sobre objetivos de reducción de emisiones no frenará el cambio climático por sí solo. Para cumplir esos objetivos, serán necesarias políticas bien planteadas, ambiciosas y de obligado cumplimiento que favorezcan la reducción de emisiones. 

Estas políticas deberán servir de catalizador para que la industria y los hogares reduzcan sus emisiones en todas las fases del proceso de producción y consumo. Es obvio que las emisiones generadas por las actividades económicas están estrechamente relacionadas con nuestras pautas de consumo.

Las autoridades locales, los hogares y los particulares pueden hacer presión sobre los sistemas productivos existentes. Si reducimos nuestro consumo y optamos por consumir productos y servicios que tengan impactos menos graves sobre el medio ambiente, lograremos que cambie la forma de producir y comercializar dichos productos y servicios. Al final, si queremos actuar de forma favorable al clima, debemos empezar por nuestra propia casa. 

+ info: AEMA

Las ciudades de Murcia y Palma de Mallorca se encuentran entre las tres primeras finalistas al Premio de la Semana Europea de la Movilidad (SEM), que se entregará el próximo 20 de abril en Bruselas.



El Premio de la Semana Europea de la Movilidad tiene como objetivo reconocer a la entidad local que se considera que ha hecho el mayor esfuerzo para aumentar la concienciación pública respecto a los beneficios de la movilidad sostenible y que ha aplicado medidas para lograr un cambio hacia un transporte urbano sostenible.



La Semana Europea de la Movilidad es una iniciativa impulsada por la Comisión Europea y coordinada en España por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente que se celebra anualmente del 16 al 22 de septiembre. En su pasada edición de 2015, la SEM ha reunió a 340 municipios españoles que suman casi 22 millones de habitantes. Los municipios españoles han sido líderes de participación en este Proyecto desde su inicio, representando casi el 20% del total europeo en la edición 2015 (de las 1.873 ciudades participantes en Europa, 378 han sido españolas).

En el año 2015, el número de medidas permanentes realizadas por municipios españoles totalizó 2.063, lo que representa el 36 % del ámbito europeo.



Criterios de valoración
La Comisión Europea ha hecho públicos los nombres de las tres ciudades finalistas al Premio de la Semana Europea de la Movilidad 2015, Lisboa, Murcia y Palma de Mallorca. Las siete ciudades europeas que completan el top ten son: Bacau, Lárnaka, Miskolc, Nottingham, Sofia, Tríkala y Viena.

La candidata ganadora es elegida por un panel independiente de expertos en transporte que evalúan todas las solicitudes elegibles y eligen a los 10 ayuntamientos que consideren que han desempeñado de forma destacada los objetivos en materia de movilidad sostenible. Junto con los otros finalistas y ciudades preseleccionadas, la ciudad ganadora será promovida activamente dentro de las mejores prácticas en la campaña de transporte urbano sostenible a través de los diversos canales de comunicación de la SEM en eventos y publicaciones.

Los miembros del Jurado han considerado los siguientes aspectos para evaluar la calidad de cada solicitud:

-El grado en que las actividades de promoción de la temática de la SEM 2015 se han centrado en la calidad de la intermodalidad con el lema “Muévete por un aire más limpio”.

-El alcance del plan de acción realizado sobre eventos, actividades individuales y la participación de los ciudadanos.

-El enfoque estratégico en la comunicación y la promoción de la SEM y la verificación del éxito a través de distintas pruebas.

-El impacto ambiental y social de las medidas permanentes aplicadas con motivo de la SEM o antes de 2013, con el apoyo de pruebas (por ejemplo, número de usuarios del nuevo carril bici; estimación de las emisiones de carbono ahorradas o el número de viajes en coche privado evitados, etc.).

-La calidad y el alcance de las alianzas con los actores locales para la organización de la SEM.

Además de estos criterios, el jurado también ha tenido en cuenta el compromiso continuo de los candidatos con la SEM y el esfuerzo demostrado en relación con la cantidad del presupuesto disponible.

Fuente: Magrama 


El uso que hacemos de los recursos hoy en día es insostenible y está afectando a nuestro planeta. Tenemos que facilitar la transición a una economía circular y verde superando las políticas de gestión de residuos y centrándonos en el ecodiseño, la innovación y la inversión. La investigación puede favorecer no solo la innovación en la producción, sino también los modelos de negocio y los mecanismos de financiación.



El 2 de diciembre de 2015 la Comisión Europea propuso un nuevo paquete legislativo en materia de economía circular. El paquete contempla diferentes fases del ciclo de vida extendido de un producto, desde la producción y el consumo, a la gestión de los residuos y a la comercialización de materias primas secundarias. Con las acciones propuestas se pretende beneficiar tanto al medio ambiente como a la economía y extraer el uso y valor máximos de todas las materias primas, productos y residuos, favoreciendo el ahorro energético y reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero.


El informe El medio ambiente en Europa:en Estado y perspectivas 2015 (SOER2015) sitúa el punto de mira en el reto de la sostenibilidad que tenemos en la actualidad. Consumimos y extraemos más recursos de los que el planeta puede generar en un periodo determinado. Por un lado, las actividades económicas contribuyen a mejorar el bienestar humano y a reducir la pobreza. Por otro, contaminan el medio ambiente, provocan el calentamiento del planeta, dañan la salud humana, al tiempo que debilitan la capacidad del planeta para generar los recursos que necesitamos.

Si bien todavía no hay ningún país que haya sido capaz de «vivir bien» dentro de sus límites naturales, es cierto que hay algunos signos esperanzadores. La Unión Europea ha empezado a romper el vínculo entre el crecimiento económico y el consumo de energía y materias. Los europeos reciclan muchos más residuos domésticos y envían menos a los vertederos. Las industrias ecológicas (por ejemplo, el trabajo en energías renovables, el tratamiento de aguas residuales, el control de la contaminación del aire, etc.) han crecido de manera considerable durante la última década y han permitido crear puestos de trabajo a pesar de la reciente recesión.

Reducir la dependencia de materias primas
Una economía circular trata de reducir la «entrada» de nuevos recursos, especialmente de recursos no renovables, para utilizar, reutilizar y poner en valor los recursos en la economía en la medida de lo posible, y de minimizar la «salida» de emisiones y residuos.

El mensaje es inequívoco: una potencial reducción de los residuos podría generar ventajas sustanciales para la economía y la salud humana. Mantener en uso los recursos ya extraídos no solo reduciría la dependencia de las materias primas (extraídas en el propio país o importadas), sino que además aumentaría la competitividad al tiempo que reduciría la presión medioambiental. Según un análisis preliminar realizado por la AEMA, los países europeos ya están dando pasos para mejorar la eficiencia en el uso de los recursos, debido principalmente a la preocupación en términos económicos que genera la dependencia en ellos.

Potenciar el ecodiseño
Para empezar, el ecodiseño resulta esencial para incrementar el potencial del reciclado y para prolongar la vida útil de los productos. Podemos diseñar los productos de modo que se puedan reparar fácilmente, que se puedan cambiar solamente las piezas que se estropeen y que podamos separar cómodamente sus componentes para reciclarlos del modo más adecuado.

Asimismo tenemos que tener en cuenta los aspectos relacionados con la salud y el medio ambiente de los materiales que utilizamos en nuestros productos. El ecodiseño también podría ayudar a sustituir los materiales que tienen un gran impacto medioambiental por otras alternativas mejores. Por ejemplo, está claro que la exposición a productos químicos peligrosos supone una seria preocupación para la salud humana. Podemos adoptar ciclos de materiales limpios para evitar la exposición humana a sustancias peligrosas y para proteger los ecosistemas de la contaminación química.

Del mismo modo, los biomateriales, como la madera, los cultivos o las fibras, pueden utilizarse para una amplia gama de productos y de necesidades energéticas. Además de proporcionar una alternativa a los productos derivados de los combustibles fósiles, los biomateriales también son renovables, biodegradables y compostables. No obstante, resulta necesario analizar la potencial transición a los biomateriales teniendo en cuenta en qué medida pueden afectar al ecosistema y a la salud. Por ejemplo, la explotación forestal es limitada, y quemar madera para generar energía podría empeorar la calidad del aire.

Inversiones para fomentar la innovación
La ecoinnovación y las soluciones innovadoras que fomentan la investigación son fundamentales para poder hacer la transición a una economía circular. La innovación no se limita solo a los procesos de producción. Se podrían fomentar y apoyar nuevos modelos de negocio. Existen ya numerosos ejemplos de soluciones innovadoras que proporcionan servicios en lugar de vender productos: por ejemplo, no es necesario tener un coche para poder satisfacer las necesidades de transporte. Estos modelos de negocio colaborativos que se centran en la provisión de servicios podrían beneficiarse de nuevos mecanismos de financiación, habida cuenta de que la inversión y el beneficio presentan un patrón temporal diferente.

En Europa los fondos públicos ya apoyan la ecoinnovación, pero pueden desempeñar un papel aún más importante del que tienen en la actualidad. Las inversiones en infraestructuras, investigación y ciudades podrían orientarse a facilitar la transición a una economía verde. Un fuerte compromiso con la sostenibilidad, respaldado por un claro marco financiero y reglamentario, envía la señal correcta a todas las partes interesadas.

Está claro que la transición hacia una economía verde y circular beneficiará a algunos grupos y sectores al tiempo que supondrá una presión para otros. Los responsables políticos tendrán que tener en cuenta consideraciones de equidad, tanto a escala europea como mundial, y ofrecer medidas de apoyo para facilitar y dirigir la transición socioeconómica 

Fuente: AEMA

Vivir bien dentro de los límites del planeta es un objetivo primordial en la visión de la Unión Europea para 2050. La economía circular puede contribuir a esta filosofía de vida, ya que en esencia lo que busca este nuevo mantra es aumentar la cantidad de recursos renovables o reciclables disponibles al tiempo que reduce el consumo de materias primas y energía, reduciendo las emisiones y las pérdidas de materiales. Compartir, reutilizar, reparar, renovar y reciclar productos y materiales, constituyen el abc de la economía circular junto con el diseño ecológico, y son acciones que ayudarán a mantener la utilidad productos, componentes y materiales, y retener su valor. En definitiva, la economía circular es la secuela del famoso concepto desarrollo sostenible que escuchamos hasta la saciedad a comienzos de siglo, parece que es tiempo de renovarse.


Entre los principales beneficios para Europa tenemos por una parte la reducción de las presiones medioambientales, y por otra la disminución de la dependencia del continente de las importaciones de otras regiones del globo. Una situación que irá a más, ya que la competencia internacional por los recursos aumenta año tras año, y si no queremos que se convierta en un verdadero quebradero de cabeza o algo más, la puesta en marcha de estrategias encaminadas a la autosuficiencia del viejo continente serán vitales en un futuro próximo. La economía circular conllevaría también un ahorro de costes de producción, un aumento de la competitividad de la industria europea y beneficios en términos de oportunidades de empleo.

Sin embargo tendremos que superar numerosos escollos, las tensiones inter-sectoriales y políticas estarán a la orden del día en las primeras fases de la transición, ya que inevitablemente habrá sectores que ganen y sectores que pierdan. Europa es y deberá seguir siendo una fuente de conocimiento e innovación, es decir la I+D+I será primordial si queremos seguir siendo una región de referencia, lo que tendrá daños colaterales en algunas de las industrias tradicionales y sus trabajadores, que tendrán que adaptarse a los nuevos tiempos

El objetivo general de la economía circular es la gestión de todos los recursos naturales de manera eficiente y, sobre todo, de forma sostenible. La transición hacia una economía circular en Europa necesitará involucrar a todos los grupos interesados: gobiernos, empresas y finanzas, sociedad civil y ciudadanos. Se requerirá un esfuerzo en cambiar la forma de gestionar las empresas, las finanzas y los modelos fiscales, junto con un impulso de la innovación y la educación tecnológica y social.




¿Qué es la economía circular?
La economía circular (en inglés Circular economy, CE) es una simple, pero convincente estrategia, que tiene por objeto reducir tanto la entrada de los materiales y la producción de desechos vírgenes, cerrando los bucles o flujos económicos y ecológicos de los recursos1 . El análisis de los flujos físicos de recursos proviene de la escuela de pensamiento de la ecología industrial2 en la cual los flujos materiales son de dos tipos, nutrientes biológicos, diseñados para reintroducirse en la biosfera sin incidentes, y nutrientes técnicos, los cuales están diseñados para circular con alta calidad en el sistema de producción pero no vuelven a la biosfera.

El término abarca más que la producción y consumo de bienes y servicios, incluyendo un cambio de combustibles de fósiles al uso de energía renovable, y la función de diversidad como característico de resiliencia y sistemas productivos. Incluye la discusión de la función de dinero y las finanzas como parte del debate, y algunos de sus pioneros han pedido renovar las herramientas de medida de rendimiento económicas. 


Cerrando el ciclo: el plan de acción de la UE para la economía circular

La Comisión Europea ha adoptado un ambicioso paquete de medidas para implementar la economía circular, que incluye la revisión de las propuestas legislativas en materia de residuos para estimular la transición hacia una economía circular, que impulsará la competitividad global, fomentará el crecimiento económico sostenible y la generación de nuevos puestos de trabajo.

El plan de acción de la UE para la economía circular establece un programa concreto y ambicioso, con medidas que abarcan todo el ciclo: de la producción y el consumo de la gestión de residuos y el mercado de materias primas secundarias. 

Las acciones propuestas contribuirán a "cerrar el círculo" de los ciclos de vida de productos a través del impulso del reciclaje y la reutilización, y aportarán beneficios tanto para el medio ambiente como la economía.

Las propuestas legislativas revisadas sobre los residuos establecieron metas concretas para la reducción de residuos y establecen un camino ambicioso y creíble a largo plazo para la gestión de residuos y el reciclaje. Los elementos clave de la propuesta de residuos incluyen:
  • Un objetivo común de la UE para reciclar el 65% de los residuos municipales para el año 2030;
  • Un objetivo común de la UE para reciclar el 75% de los residuos de envases en 2030;
  • Un objetivo vertedero unión a reducir los residuos hasta un máximo de 10% de todos los residuos antes de 2030;
  • La prohibición del vertido de residuos recogidos de forma selectiva;
  • Promoción de instrumentos económicos para desalentar el depósito en vertederos;
  • Medidas concretas para promover la reutilización y estimular la simbiosis industrial - convirtiendo una industria de subproducto en la materia prima de otra industria;
  • Incentivos económicos para los productores pongan productos más 
  • ecológicos en los planes de recuperación de apoyo al mercado y y reciclaje (por ejemplo, para el embalaje, baterías, equipos eléctricos y electrónicos, vehículos).
+info: EEA